Stanley era un hombre que vivía cada día al máximo. Era un ejecutivo de ventas, mentor, devoto esposo, padre cariñoso y una estrella novata del tenis. Un día, Stan sufrió un traumatismo de cráneo grave que le causó muerte cerebral. Cuando su esposa, Judy, recibió la solicitud sobre donar los órganos de Stan para hacer trasplantes, supo que había una sola respuesta. Decidió donar los órganos de Stan para dar a otros la oportunidad de vivir.
La preciada donación se ha convertido en un legado duradero para su hija, Jillian. Ahora, Jillian alienta a otros a que consideren dar el "regalo de la vida" en su trabajo como voluntaria para LifeLink de Georgia. Ha hablado acerca de la donación de órganos a estudiantes universitarios. Apareció en la recaudación de fondos Tom Glavine's Spring Training, presentada por Tom Glavine de los Atlanta Braves, a beneficio de la Georgia Transplant Foundation. Allí, presentó la guitarra autografiada de Hannah Montana como un artículo de subasta. Eso le dio la oportunidad de instar a 600 invitados a inscribirse como donantes de órganos.
Inspirada por el ejemplo de su padre, Jillian demuestra que nunca es demasiado pronto para que un niño empiece a ayudar a otros.
La historia de Jillian es cortesía de LifeLink de Georgia, Norcross, GA.